Nestor tenía 28 años y era soltero cuando fue secuestrado. Era secretario de prensa y propaganda del Gremio de Foetra de Tucumán. En 1974 había viajado a Venezuela representando a los telefónicos durante la gestión de Guillan, entre otros viajó en compañía de Zanola por bancarios.
Era ex-seminarista del Seminario Mayor Arquidiocesano donde cursó estudios hasta 2ndo añode filosofía. Estudiaba en la Universidad Tecnológica de Tucumán.
Fue secuestrado en la vía pública. Nunca mas se supo nada de él.
Era egresada en 1972 de la Escuela Sarmiento, e ingresó en 1973 a la carrera de zootecnia (L.U. 2088/73) donde cursaba el 1er año. Se inscribió por última vez en 1974.
Desapareció el 27 de Mayo de 1976 en Tucumán, fue vista por última vez, en compañía de su esposo, “Parche” Díaz, y un hermano, en el Campo de Concentración de la Jefatura de Policía de Tucumán por Juan Martín el 1-8-76
Silvana tenía 23 años, Ricardo 24. Se habían casado en enero de 1976 y vivian en el Bº de Mataderos, Ciudad de Buenos Aires. Ella era oriunda de la Capital Federal y Ricardo era tucumano. El era carpintero y ebanista y junto a Silvana vivían de lo que producía la carpintería de Ricardo, mientras ella concluía su carrera. El sueño de ambos era vivir en el interior del país donde él trabajaría de carpintero y ella de maestra rural. La pareja militaba en el PRT-ERP.
Fueron secuestrados en una plaza pública de San Salvador de Jujuy el 7 de enero de 1977. Fueron vistos en la cárcel de Villa Gorriti de esa ciudad y, según testimonios, sacados de allí el 20 de enero del mismo año para ser trasladados al CCdDyT conocido como “la Jefatura” de la pvcia de Tucumán, dónde fueron vistos por sobrevivientes que señalan a Ricardo como quien les levantaba el ánimo al resto de sus compañeros secuestrados, diciéndoles que resistan que seguro sus familias estaban afuera buscándolos
El Centro Clandestino de Detención y Tortura “La Jefatura” se montó como tal a partir del año 1975 durante la vigencia del Operativo Independencia y funcionó durante la Dictadura Militar, hasta aproximadamente fines del año 1978. Funcionaba en el edificio de la entonces Jefatura de Policía situado en la manzana ubicada en la intersección de las calles Junín, Santa Fé, Av. Sarmiento y Av. Salta.
Detenido-desaparecido en San Miguel deTucumán junto a su compañera Adriana Cecilia Mitrovich. Él fue secuestrado un día más tarde que su mujer, el 29 de abril de 1977.
Ambos eran militantes del peronismo montonero.
Fuente:RB
28 años.
Casado
.Estudiante de Aux.tecn..
LE No:4610913
No.CONADEP:5117, Decl.No:4433
Fue secuestrado de su trabajo en S.M.TUCUMAN C.Post:4000
Visto en C.C.D. JEFATURA DE POLICIA DE TUCUMAN el:0/0/77
En testimonio No:00440
Nacido el 14 de julio de 1953. La escuela secundaria la hizo en el Gymnasium Universitario de su provincia de nacimiento, revelando ya dotes y principios humanos para combatir la injusticia y la arbitrariedad que emanaba de los estamentos jerárquicos en aquel establecimiento educativo; organizando así huelgas con éxito contra la prepotencia institucionalizada. Siguió estudios de Derecho en la Universidad Nacional de Tucumán. Se sumó a las filas de la Juventud Universitaria Peronista. Trabajaba en un servicio de radiollamadas. Ya el 24 de junio de 1975 (desgobierno de Isabel Martínez) fue secuestrado por primera vez, siendo alojado en la Jefatura policial tucumana y luego llevado al CCD “La Escuelita” que funcionó en la escuela “Diego Rojas” de Famaillá, en la misma provincia. Interrogado durante 48 horas, luego fue liberado. Pero el 22 de abril de 1977, fue secuestrado nuevamente de su casa de la calle Italia al dos mil, pasando nuevamente por Jefatura y siendo obligado a declarar bajo tortura. Según cuentan fue asesinado allí mismo. Ese mismo día se llevaron de sus casas y siguen también secuestrados-desaparecidos, sus amigos y compañeros de J.P.: Gustavo Raúl Santillán, Ricardo Daniel Somaini y Victor Manuel Moreira (ver sus registros). La tragedia en el caso particular de la familia Ponce no terminó allí. Su madre, la pianista Myrtha Raia, a la edad de 84 años, fue asesinada en la madrugada del 26 de enero de 2013, en su casa de Barrio Jardín, Tucumán, por fascinerosos que no robaron nada. Ella iba a declarar el próximo 7 de febrero del mismo año en la Megacausa que condena a los represores y torturadores provinciales.
Nació y se crio en Andalgalá, en la provincia Catamarca. Se recibió de Físicoy ejerció como docente hasta la elección provincial de 1973 cuando fue elegido como Senador por la provincia.
En marzo de 1973 en las elecciones, las primeras elecciones tras la dictadura militarautodenominada Revolución Argentina, fue elegido como Senador por la provincia de Tucumáncomo parte de la lista del FREJULI. Vargas Aignasse pertenecía a la organización llamada FANE (Frente de Agrupaciones Nacionales Estudiantiles) en la que había demócratas cristianos, socialistas nacionales, radicales y peronistas como él.
En la madrugada del 24 de marzo de 1976, horas antes del golpe de Estado, Vargas Aignasse fue arrestado por la policía provincial, que luego fue puesto a disposición del Poder Ejecutivo Nacional. Días más tarde, su mujer logró que la dejaran verlo, pero no hablarle, en la cárcel de Villa Urquiza. La condujeron a una oficina desde la que se veía el patio, donde Vargas Aignasse caminaba solo. No le permitieron hablarle, sólo mirarlo. Vio que tenía marcas de la tortura.2
Mientras almorzaba en el Mercado del Norte, Juan Carlos Suter fue secuestrado. Su crimen: pertenecer a la juventud peronista y ser hijo de un dirigente sindical de la FOTIA perseguido durante el gobierno de Ongania. A partir de ese momento, según cuenta la crónica periodística, su padre se levantaba a las 5 de la mañana y volvía a las 12 de la noche buscándolo por todo Tucuman. Sin suerte alguna.
Juan Carlos, medalla de oro en la Escuela Mitre de Tafi Viejo y en el Colegio Nacional de San Juan, ya había terminado de cursar Ingeniería en la UNT, era profesor de alemán y enseñaba en la secundaria, estaba casado y tenia un bebe de 9 meses. Militante ademas de la acción católica visitaba constantemente la Iglesia de la Villa Obrera (una de las zonas mas pobres de Tafi Viejo)
Finalmente a instancias de su tio, Alberto René Sutter, uno de los gerentes de canal 10 de Tucuman y una persona muy querida por todos en esa época, se consiguió «blanquear» a su detención y fue pasado al penal de Villa Urquiza. Allí después de dos largos meses su padre logro verlo, lo que encontró fue desgarrador según el testimonio de su hermano: » lo trajeron a la Jefatura de Policía, Juan Carlos había estado dos meses en la Escuelita de Famaillá, con los ojos vendados. Estaba muy flaco y pelado. Mi hermano era alto, de un metro noventa, más bien gordito y cuando lo detuvieron habrá pesado fácilmente unos cien kilos. En dos meses debe haber bajado unos 40 kilos. Nos contó cómo lo torturaban: lo ataban en un elástico de cama metálica, lo mojaban y le daban golpes de corriente, otros días lo colgaban de los pies y lo introducían en un tacho con agua, lo encerraban en una celda de un metro y le ponían parlantes a todo volumen, con consignas militares, para enloquecerlo. Algunos otros detenidos no pudieron soportar las torturas y murieron»
Finalmente llegaron las buenas noticias: su padre habló con el teniente coronel Vera Robinson, en el Comando, y le mostró la medalla de oro que le había dado el Ejército porque había cumplido el servicio en el Hospital Militar y se había destacado, este le ofreció la oportunidad de salir del país, extraditado a Alemania o Suecia. Sin embargo grande fue su decepción cuando al decirle la noticia manifestó:“Yo no he hecho nada malo para irme del país. Aquí he nacido y aquí voy a morir”.
Finalmente la situación se endureció, se prohibieron las visitas. Un 9 de Julio de 1976 recibieron el llamado de que Juan Carlos Suter había muerto de una neumonia (en realidad había sido asesinado). después de un largo peregrinar y de situaciones horrorosas a los 5 dias su familia recupero su cuerpo destrozado. A cajón cerrado, sin permitirle realizar un velatorio, pese a ello 200 personas estuvieron en el cementerio para despedir a este brillante joven Tucumano. Su esposa Ana María Tejeda no pudo soportar la situación y comenzó a gritar contra los asesinos de su marido. Esa misma noche a las 4 de la mañana, teniendo apenas tiempo de esconder a su bebe entre las sabanas, a sus jóvenes 22 años fue secuestrada de la casa de sus padres y así continua hasta el día de hoy.
Uno reflexiona sobre esta fecha, sabiendo las tragedias que sufrió la sociedad en su conjunto, como nuestros militantes, y no puede dejar de pensar que a veces las ideas justicialistas deben llevarse hasta el final ¿Acaso sabrán los habitantes de Lomas de Tafi cuando caminan la calle que lleva su nombre, la historia y la tragedia de Juan Carlos Suter y su familia? Ojala que este texto sirva para algo, así como los que cuestionan el día de la Memoria y no entienden su significado, piensen acerca de ello.
El Escuadrón Perdido, por José Luis D’Andrea Mohr.
Nació: 30 de mayo de 1955
Desapareció: 3 de septiembre de 1976
Unidad: Batallán de Ingenieros de Combate 141
Jefe: Teniente coronel Virgilio CORREA ALDANA
Jefe de Compañía: Teniente primero Jorge D’AMICO
Comandante de Zona: General Luciano Benjamín MENENDEZ
Comandante de Subzona CCD: General Antonio Domingo BUSSI
Jefe de Area CCD: Coronel Ernesto ALAIS
Jefe de Policía de Santiago del Estero (1976): Teniente coronel Aldo VALENZUELA
Germán Francisco CANTOS cumplía el servicio militar en el Batallón de Ingenieros de Combate 141, asentado en Santiago del Estero.
Como habían hecho los días 21, 22, 28 y 29 de agosto, los padres de CANTOS fueron a visitar a su hijo el domingo 5 de septiembre. En la guardia del Batallón les informaron que el soldado había salido franco el día 3 de septiembre, algo más tarde que el resto de sus compañeros porque no tenía firmada la cédula militar por el jefe de Compañía. El suboficial que los atendió agregó que el conscripto estaba ausente sin causa; no había regresado desde ese día.
Los padres del muchacho le expresaron al suboficial su desconcierto, porque Germán no había ido a su casa durante el franco. El militar respondió: “Y… a veces se escapan algunos días con una chinita y vuelven antes de los cinco días, para no ser desertores”.
Días después, sin noticias del muchacho, los padres volvieron al Batallón y allí les dijeron que su hijo había sido dado de baja por desertor y que pesaba sobre él “orden de captura”. Para la familia CANTOS resultaba absurdo que no hubiesen ido a buscar al desertor a su casa, por eso radicaron una denuncia en la Policía de Santiago del Estero, el 13 de septiembre de 1976. (No está de más recordar que la Policía, entonces, dependía del Ejército.)
Pasaron cuatro meses de angustia y búsqueda de respuestas, sin más resultado que el dolor de la pérdida, hasta que el 18 de diciembre de 1976 se presentó en la casa de la familia CANTOS una persona que no quiso identificarse (tal vez se trate del sacerdote cátolico Serafín SPEDINGER). Ese hombre les entregó una carta del hijo fechada el 15 de diciembre de 1976. Del texto se puede colegir que, al menos, fue leído por los captores, si no parcialmente dictado. Termina así: ‘[…] Si en una de esas no cuentan conmigo para pasar las fiestas, tengan en cuenta que es una falta con preaviso. De ustedes y para siempre. Germán”.
A partir de esa carta, la familia no tuvo más noticias de Germán, excepto que fue visto en 1977 en el centro clandestino de detención “Arsenal de Tucumán” junto con su primo hermano Luis Antonio CANTOS. Ambos continúan desaparecidos.