Fue secuestrado en la vía pública en CAPITAL C.Post:1042
No hay testimonio de su paso por un C.C.D.
El hermano del sociólogo “Cacho Higa recuerda que la policía se lo llevó el 22 de agosto de 1976 del bar La Paz adonde había ido a jugar al ajedrez después de una volanteada en el centro por el aniversario de la masacre de Trelew.
Juan Takara fue el séptimo de trece hermanos de una familia de inmigrantes japoneses. Nació en Caballito el 9 de Junio de 1944. Sus padres, Seishun y Kamena, se dedicaban al negocio de la tintorería donde Juan, años más tarde, lavaba la ropa.
Completó sus estudios secundarios en el Colegio “Hipólito Vieytes” de Caballito. Al finalizar, estudió en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires. Durante sus años de estudiante no tuvo participación en los centros políticos universitarios. Su militancia en la Juventud Peronista no se produjo hasta después de graduarse como Contador Público.
Al momento de su desaparición, el 18 de Junio de 1977, era empleado en la Dirección General Impositiva (DGI), estaba casado con Norma y su hija Kamena sólo tenía ocho meses de vida. Fue secuestrado de su domicilio en Marcos Paz. Otros tres vecinos de Marcos Paz, Olga de Souza Pinto, Enrique Sous y Oscar Sánchez fueron secuestrados en esos días.
CASADO CON LAURA NOEMÍ TERRERA, DESAPARECIDA 24/07/1977
Alfredo nació en la ciudad de San Juan el 2 de enero de 1953. Su familia lo llamaba “Freddy”. El 8 de noviembre de 1976 nació su hija, Celina Rebeca.
Laura nació el 1° de junio de 1956 en la ciudad de Mendoza. Su familia la llamaba “Laurita” y sus amigos “Lali”.
El 8 de noviembre de 1976 nació su hija, Celina Rebeca. Ambos militaban en la organización Montoneros. El 24 de julio de 1977 la pareja junto a su pequeña hija, se despidió de la familia de Alfredo en la terminal de ómnibus de la ciudad de San Juan, se dirigían a la ciudad de Mendoza. Esa fue la última vez que los vieron. Existen diferentes versiones sobre las circunstancias del secuestro, algunas indican que fueron detenidos en el trayecto de San Juan a Mendoza, otras, que al llegar a la terminal mendocina los esperaba un operativo del cual lograron escapar y se dirigieron a la ciudad de Buenos Aires. Hasta el momento no existen precisiones.
En septiembre de 2006 el MEDH de Mendoza, sede de la Red por el Derecho a la Identidad en esta provincia, recibió un comunicado anónimo en el cual alguien decía reconocer a la niña cuya fotografía había aparecido en una escena de una serie televisiva que tematizaba la apropiación de menores durante la última dictadura militar. En febrero de 2007 el MEDH reactivó la causa ya iniciada en relación a la desaparición y apropiación de Rebeca Celina ante al Juez Dr. Walter Bento. Frente a la evidencia presentada, el juez ordenó la realización de los análisis inmunogenéticos a la joven. El 13 de marzo de 2007 los resultados confirmaron que se trataba de Rebeca Celina, hija de Laura y Alfredo.
Mauricio Amílcar López. Desaparecido el 1 de enero de 1977.
Mauricio Amílcar López
Mauricio Amílcar López nació en Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, el 18 de abril de 1919.
Su padre trabajaba en Correos y Telégrafos, y Mauricio era uno entre varios hermanos y hermanas. Recibió su formación inicial en el marco de la Iglesia Evangélica de los Hermanos. Luego la familia se trasladó a Mendoza, donde Mauricio estudió filosofía.
Fue profesor de lógica y filosofía, de psicología y pedagogía, y dictó cursos y conferencias en múltiples institutos y centros ecuménicos en Berlín, Holanda, Suecia, Canadá, Bélgica, Escocia y Nueva York, como integrante del Consejo Mundial de Iglesias.
En ese marco Mauricio tuvo una destacada actuación, y colaboró en la organización de la Conferencia Mundial de Iglesia y Sociedad, “El compromiso cristiano en la revolución técnica y social de nuestro tiempo”, que tuvo lugar en Ginebra en 1966. Esa conferencia reunió a sectores cristianos progresistas, cuestionó la dominación del Norte en la teología cristiana, y denunció las relaciones y estructuras injustas a nivel local y mundial. La participación e influencia de los latinoamericanos fue notable en esa oportunidad.
Mauricio era una persona muy comprometida tanto en su tarea docentecomoen su vida como cristiano. El año de 1973 fue significativo en su vida: fue nombrado Rector de la recién creada Universidad Nacional de San Luis, cargo que ocupó hasta el golpe militar de 1976, y participó activamente de la organización de la recepción de los exiliados chilenos, que llegaban por miles después del golpe perpetrado contra el gobierno de Allende por las fuerzas armadas del vecino país.
En 1972 la Pastora Alieda Verhoeven y el Obispo Federico Pagura, de la Iglesia Metodista, el ex sacerdote católico Rolando Concatti, el pastor Mauricio López, de la Iglesia de los Hermanos Libres, Oscar Bracelis y otros habían creado la Fundación Ecuménica de Cuyo (FEC). Ante la avalancha de asilados, la Fundación empezó a alojarlos, primero en sus casas y luego en los templos. La Iglesia Metodista se convirtió en un centro de ayuda y coordinación de las tareas de recepción. Contaron con el apoyo del Comité por la Cooperación por la Paz en Chile (COPACHI), del Consejo Mundial de Iglesias y del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Mauricio fue el primer Rector de la UNSL y por sus valores científicos, morales y humanos fue un referente para la mayoría de los docentes, alumnos y no docentes de su universidad. Nora, que fue su alumna cuando era muy jovencita, lo recuerda como una persona muy agradable, con sus ojos azules, profundos, su hablar pausado y reflexivo, su enorme capacidad para explicar, y más importante todavía, para escuchar la palabra de sus estudiantes “como si ellxs le revelaran el mundo”. En Mauricio destaca su profunda humanidad. Pudo haberse ido, dice Nora, pero no pudo imaginar que existiese tamaña brutalidad.
Mauricio Lopez fue secuestrado el 1 de enero de 1977 de su casa de Mendoza, y estuvo detenido en el CCD Las Lajas.
47 años, de fe peronista, fue detenida el 6 de enero de 1978 en la madrugada, en su domicilio de la calle Ombú 2778 de Lomas de Zamora en la provincia de Buenos Aires. Esposada y encapuchada, fue trasladada al Colegio Militar de la Nación ubicado en la ciudad de El Palomar y luego al CCD El Campito, ubicado en la guarnición militar de Campo de Mayo. Su hija Juana recuerda que Haydeé fue brutalmente golpeada y torturada, que se quejaba de dolor en las piernas y que tenía hematomas en todo el cuerpo. El día anterior fue secuestrado su esposo, Juan Carlos Campero. En enero de 2010, un obituario de “Página 12” de sus hijos y nietos la recordaba así: “Mamá, qué difícil fue sin ti. Lo bueno es que nos educó para lidiar con este dolor. ¡Exigimos justicia! Te queremos, pedimos una prisión común por genocidio. No olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos ”.
Nació en la ciudad de Mendoza el 4 de diciembre de 1951
Hija de Dora Elina Montenegro y de Jorge Enrique Lillo.
Su Documento Nacional de Identidad es el nº 10.352.318
Su domicilio real lo era en Martínez de Rosas 3395, Mendoza.
Estudiaba en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Cuyo y en el año 1976 se encontraba rindiendo los últimos exámenes de su carrera y realizando la residencia. Estudiante destacada, se desempeñó en la Facultad como auxiliar docente, y su vocación de médica junto a su sensibilidad social le hicieron participar de campañas de vacunación y dictar cursos de primeros auxilios. Se acompañan constancias en copias simples.
Las características físicas de María Cristina Lillo, cuya fotografía acompañamos en copia, eran: contextura pequeña, cabello negro, tez blanca.
En las primeras horas del día 8 de junio de 1976, entre la 1 y las 2 horas aproximadamente, María Cristina estaba acostada en su cuarto, el padre y su esposa Sra. María R. Garro acababan de llegar de una fiesta familiar y también estaba presente Jorge Enrique Lillo, de 20 años de edad. Tocaron el timbre de la casa y al abrir la puerta, ingresó un grupo de hombres encapuchados (entre tres y cinco) quienes rápidamente redujeron a los integrantes de la familia y se llevaron a la joven. Todo ocurrió en pocos minutos. Los vecinos habrían manifestado no haber visto ni oído nada que pudieran aportar como información sobre el hecho, lo que a pesar del tiempo transcurrido deberá verificarse mediante encuesta.
El padre de mi representado ya ha fallecido. La gestión realizada en su oportunidad fue denunciar el hecho ante la Seccional 6ª de Policía, originándose el Sumario nº 205 que fue elevado al 2º Juzgado de Instrucción de Mendoza. De la documentación existente –y que acompaño en copias simples- surge que en el Juzgado Federal de Mendoza radica una causa bajo el nº 36.286-B caratulada “Fiscal c/Autores Desconocidos por averiguación Delito” cuya fecha de apertura y estado, deberán establecerse.
La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación registra el hecho bajo el nº de actor 2841 SDH 2892.
El carácter de ausente por desaparición forzada en los términos de la ley 24.321, fue declarado en autos Nº 102.158 del 12º Juzgado Civil de Mendoza por sentencia del 5 de junio de 1998 como consta en anotación marginal de la partida de nacimiento de María Cristina Lillo.
Nació el 5 de diciembre de 1950 en Fray Luis Beltrán, provincia de Mendoza. Sus familiares lo llamaban “Tito”. Ambos militaban en el PRT-ERP. A él sus compañeros lo llamaban “Marcos”
Casado con MARÍA ANDREA TEDESCO, DESAPARECIDA 17/05/1977, EMBARAZADA 1 MES
Fueron secuestrados el 17 de mayo de 1977 en su domicilio de la localidad de Morón, zona oeste del Gran Buenos Aires. La joven estaba embarazada de un mes. Posiblemente, hayan permanecido detenidos en Campo de Mayo.
La pareja y el niño/a que debió nacer en cautiverio permanecen desaparecidos.